miércoles, 27 de junio de 2012

Hiroshima

¡Ohayo!

Hoy, hemos pasado el día en Hiroshima.
No recordaba que hubiese tanto rato en tren desde Osaka hasta Hiroshima, pero bueno. Al final hemos llegado bastante pronto allí.

El día en Hiroshima ha estado bastante nublado, cosa que agradezco. Yo creía que moriría de calor y, por el contrario he podido ir tranquilamente a todos lados.


Cuando hemos llegado, lo he visto todo muy cambiado y, en un primer momento, no recordaba cómo llegar hasta el Museo conmemorativo de la paz, pero al final lo hemos conseguido jajaja.
Si cuando fui hace 3 años me encantó, esta vez todavía me ha gustado más. Obviamente, a parte de la entrada, he vuelto a coger la audio-guía y a lo largo de las explicaciones sobre casos reales se me ha puesto la piel de gallina... Son historias realmente muy fuertes y más sabiendo que todas ellas son reales...
Hemos terminado que ya eran las 2 de la tarde, así que hemos ido a comer. Y hoy ha tocado ramen ¡Qué ganas tenía de volver a comer un ramen bien hecho! Estaba delicioso realmente.


Por la tarde, hemos paseado por todo el parque de la Paz que se encuentra delante del Museo conmemorativo de la Paz. Hay bastantes estatuas y monumentos que diferentes países han aportado en motivo de la paz. La verdad es que algunos eran bastante bonitos y significativos.


Para finalizar el día en Hiroshima, hemos ido hacia el castillo. Ha sido un poco complicado llegar hasta allí a pie, pero al final lo hemos conseguido (aunque hemos terminado con los pies hechos polvo).


El castillo de Hiroshima, por fuera es precioso, pero por dentro no mantiene nada de la antigua construcción. Yo deduzco que, después de la bomba atómica, el castillo quedó hecho añicos y lo reconstruyeron de manera que se viese bien por fuera, pero que por dentro fuese como una habitación normal.



Pese a eso, a lo largo del castillo se encuentran varios trajes de samurais, katanas y otras piezas preciosas que se mantienen des de antes de la bomba atómica. También hay que decir que desde lo alto del castillo se puede ver todo Hiroshima y la vista es realmente preciosa.
En el mismo castillo, me ha sorprendido encontrar unos vestidos, tanto de Samurai como unos Kimonos. No recuerdo que estuviesen ahí la última vez que fui. Lo más sorprendente de todo, es que podías ponerte esos vestidos y hacerte fotografías de manera totalmente gratuita, así que ahora tengo foto con el traje de Samurai y con un Kimono rojo que me ha gustado bastante.


Ya para terminar, hemos vuelto en tren hasta Ôsaka y el viaje se ha hecho todavía más lento que el de ida, supongo que por lo agotados que estábamos.
Una vez en Ôsaka nos hemos vuelto para el hotel, me he dado un buen baño en los onsen del hotel y ahora me encuentro escribiendo esto antes de irme a dormir (que ya son cerca de la 1 y mañana tengo que madrugar para irnos a Kyoto).

1 comentario:

  1. Que envidia sanaaaaa jajaja que ganas de ir también, disfrutad, disfrutad muchooooo. Besos

    ResponderEliminar